domingo, 8 de febrero de 2015

Un pequeño rincon en la basta red.

Nunca me he puesto en serio a redactar un blog, siempre he pensado que escriba lo que escriba, será en cierta manera banal y no interesará a nadie. Escribimos pensando que aquello que plasmamos sobre el papel o sobre el procesador de textos, debe ser realmente sublime, de gran  relevancia para aquel que lo lee. Sin embargo, no hace falta escribir algo de gran trascendencia, escribe si te apetece escribir y escribe y punto, esto es más fácil que pararse a pensar una y otra vez si lo que has escrito vale la pena o si mejor dejarlo, lo cual es como un ciclo vicioso, escribes una línea, no te gusta, la borras, escribes otra... y la ecuación final es que, finalmente, desistes. 


Antes quienes escribían eran pocos, en milenios de historia de la humanidad los contenidos legítimos han sido aquellos plasmados en libros, guardados con esmero en monasterios, seleccionados y legitimados por aquellos que tenían la posibilidad de poder escribir. Sin embargo, la omnipresencia de los medios de comunicación en la sociedad actual, nos da la oportunidad de poder escribir a cualquiera, ya sea en un blog personal, o en las redes sociales... y esto, es un arma de doble filo, todo el mundo actualiza su perfil de Facebook diciendo lo que piensa, lo que esta comiendo, selfies, fotos con los colegas y demás. El caso es que, comunicativamente, pecamos de  infoxificados: "Internet es una suma de ideas azarosas y es difícil distinguir entre lo que alguien pensó mientras cruzaba la calle y lo que otro estudió en profundidad". Noam Chomsky. 

En fin, no sé si estas líneas contribuirán a crear más basura en el cyberespacio, si alguien se lo leerá o no. Será más fácil dejar que las ideas fluyan, quizá algún día encontraré estas líneas y me reiré un rato, de la misma manera que nos reímos y nos ruborizamos ligeramente a la vez, cuando nos encontramos con una antigua cuenta de Myspace o Fotolog... o cuando leemos publicacions del Facebook de años atrás.... dejamos nuestra huella más que nunca y esto, hará que  cada día nos sea ser más difícil discernir cuales son los factores importantes de transmisión cultural de nuestra sociedad¿Nos hemos parado a pensar en si estamos dejando un legado cultural potente? ¿O simplemente estamos amontonando una ingente cantidad fotitos de gatititos, selfies y demás?...
 



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